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La máquina anti-gravedad de la NASA
Todo lo que sube tiene que bajar. Bueno, quizá no.
Investigadores de la NASA realizarán un experimento que determinará si la gravedad podría ser ajustada en el futuro, como el volumen de un radio. La agencia espacial afirma que “apagar” la gravedad alrededor de un cohete permitirá que las naves espaciales recorran las galaxias empleando solamente la fuerza de planetas y estrellas distantes.

Tradicionalmente, los científicos han considerado la idea de una máquina anti-gravedad como una locura. Pero en una extraña conferencia a puerta cerrada en el Centro Lewis de Investigación de la NASA en Ohio, especialistas procedentes de universidades importantes, laboratorios de armamento nacional, fabricantes de sistemas de defensa, y la comunidad de investigación y desarrollo se reunieron para escuchar un reporte detallado acerca del progreso de la agencia espacial en la construcción de una máquina que alguna vez pareció imposible.

En un sorprendente cambio de su política usual, NASA no invitó a la prensa. Sin embargo, después de entrevistar a los participantes, averiguamos que NASA casi ha terminado un dispositivo que permitiría reducir la atracción gravitacional de la zona a su alrededor. Tal discreción se debe en parte a que la simple idea de tal máquina desafía al conocimiento científico convencional.

Para entender por qué, conviene saber que existen dos explicaciones sobre la gravedad, complementarias pero no totalmente compatibles. Isaac Newton describió a la gravedad como una atracción entre dos masas. Por otra parte, la teoría general de la relatividad de Albert Einstein sugiere que la masa provoca que el espacio-tiempo se modifique a su alrededor. Ambas teorías justifican por qué las manzanas se caen de los árboles; la de Einstein, además, explica por qué la luz (que carece de masa) se curva en los campos gravitatorios fuertes, como un agujero negro.

L base del experimento de NASA es una máquina diseñada en 1992 por Eugene Podkletnov, quien realizaba experimentos con superconductores de cerámica a altas temperaturas. Su experimento consistía en elevar magnéticamente un disco de cerámica conductora y girarlo a altas velocidades, hasta a varios miles de revoluciones por minuto, en presencia de un campo magnético. En el tanscurso de la prueba Podkletnov notó que los objetos colocados sobre el disco giratorio mostraban una pérdida de peso variable pero cuantificable, que iba de menos de un .5% hasta 2%, pero no encontró explicación alguna.

NASA no está muy segura de que la máquina antigravedad, que ha sido completada en un 90%, funcione. En este momento, el mayor problema es la construcción el frágil disco superconductor que está, de hecho, compuesto por dos discos. Uno está formado de metal que puede elevarse dentro de un campo magnético. El disco superior está compuesto por materiales superconductores. Este arreglo es colocado dentro de una columna de 50 cm de diámetro y 1.2 m de altura. Al inicio del experimento, será llenada con helio o nitrógeno líquido, que enfriará la máquina a -240 °C. Sólo entonces el disco comenzará a moverse.

Si la máquina funciona, como afirma Podkletnov, la atracción gravitatoria disminuirá en los delicados instrumentos. La mayoría de los físicos creen que cuando NASA encienda el interruptor del experimento no pasará absolutamente nada. Pero, por otra parte, podría iniciar una nueva era de la exploración espacial.
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La máquina anti-gravedad de la NASA - Enero 1998

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 51 - Enero 1998 - Número 1


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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus