RSS twitter.com Facebook Boletín por Correo
Google+

Foro MiMecánicaPopular
Suscríbete al Boletín
Video del día (9)
Búsqueda personalizada

Webs Amigas
El Taller
de Rolando

Todo sobre Hornos Artesanos







Políticas de privacidad



Click para ver más grande Estás leyendo parte de la revista de Julio de 1960
Recomienda este artículo a un amigo Recomienda este artículo a un amigo
Vigía Espacial - Por el Dr. Dan Q. Posin - CATEDRATICO DE FISICA DE LA UNIVERSIDAD DE DEPAUL, Y CONSULTOR Y ASESOR CIENTIFICO DE LA COLUMBIA BROADCASTING SYSTEM
SI VAMOS A VIAJAR EN EL ESPACIO, sería mejor que echásemos una ojeada al Universo en que pensamos aventurarnos.

Una de las teorías es que el Universo que conocemos es una rutilante colección de galaxias de extensión posiblemente limitada, que es curvo y que en alguna forma se repliega sobre sí mismo y nos conduce nuevamente al mismo punto. Hay otra teoría que sostiene que el Universo es "recto", de extensión ilimitada, infinito y que se expande constantemente.

Existe, además, otra hipótesis que supone que nuestro Universo es infinito, pero negativamente curvo y que también se expande. Tal vez sea posible que el hombre descubra la estructura del Universo estudiando la distribución de las galaxias en el espacio. De todos modos, éstas son las ideas de algunos de los hombres eruditos de la Tierra. Es así cómo esos hombres de ciencias interpretan las infinitas maravillas de la creación.

Otro de los misterios que existen se refiere al tiempo. ¿Desde cuándo existe el Universo y por cuánto tiempo perdurará? ¿Cómo se originó el Universo?

Consideremos primero las opiniones de Fred Hoyle, matemático y astrónomo inglés. El y sus colegas creen que es posible pensar en un Universo que nunca tuvo un principio, pues siempre existió. En otras palabras, lo que se denomina un Universo "en estado constante". Por lo tanto, el tiempo no tiene principio. Este Universo está sujeto a cambios continuos; las galaxias se forman y desaparecen, el hidrógeno se convierte en helio, la masa desaparece y se transforma en energía radiante.

De acuerdo con Hoyle, la materia que permanece dentro de los límites del Universo conocido, cambia en cantidad cuando las galaxias traspasan los "límites" a una distancia de varios miles de millones de años de luz. (En la zona "limítrofe", las galaxias se alejan de nosotros a una velocidad casi igual ala de la luz. Por consiguiente, el espacio en esas regiones se expande casi a dicha velocidad, y la luz que avanza hacia nosotros, procedente de una de esas galaxias, no llega a cruzar la distancia, siempre en aumento.) Por otra parte, de algún modo el hidrógeno aparece a nuestro alcance ya nuestra vista para ocupar el lugar de las galaxias que desaparecen. A este respecto en particular, Hoyle denomina la "creación continua" en un Universo en flujo, o un Universo en "estado constante".

Contrario a esto, y de acuerdo con Abbe LeMaitre, podemos concebir un momento definitivo que constituiría el "principio": el instante, por ejemplo, en que hizo explosión el átomo primitivo que contenía toda la materia y la energía. Un Universo concebido en esta forma sería uno "evolutivo" en que las galaxias se apartan sin cesar, y, por consiguiente, el Universo se dispersa más y más.

Hubo un tiempo en que el hombre creía que la región en que habitaba-denominada Europa y Asia-constituía el Universo. Años después, pensaron que otras regiones y grandes océanos eran también parte del Universo, y denominaron a todo esto la Tierra. Suponían que los cuerpos celestes giraban en torno de la Tierra. Posteriormente, descubrieron que el Sol era el centro de un sistema planetario y que la Tierra formaba uno de los componentes. y por fin surgió el conocimiento de que las otras estrellas también eran soles y que posiblemente eran los centros de diversos sistemas planetarios.

Como se ve, el Universo creció, o tal vez sería más exacto decir que evolucionaron los conceptos de los habitantes de la Tierra. El Universo se hallaba en espera de que lo descubrieran.

Existe un billón de otras galaxias al alcance de nuestros telescopios; pero éstos son insignificantes. Poco se sabe acerca del Universo "conocido".

"Me invade un sentimiento de religiosidad", dijo Einstein, al contemplar la grandiosidad del firmamento. No se necesita embarcarse en una nave espacial a fin de salir de este "mundo" e ingresar en las regiones del infinito. Los pobladores del mundo se hallan ya en el espacio. La Tierra es una nave espacial que da vueltas alrededor del Sol, y éste no es otra cosa que un componente menor de una galaxia que se aparta a gran velocidad de las otras galaxias a través de un enorme espacio que, tal vez, sólo sea una parte sumamente pequeña de un Universo de belleza indescriptible.

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 27 - Julio 1960 - Número 1



Mecánica Popular-Copyright (c) 2010 Hearst Communications, Inc. All Rights Reserved.
Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus