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M U S T A N G

De Muy Fácil Manejo; Poco Cómodo Atrás
Los dueños del Mustang, después de un recorrido total de más de un millón y medio de kilómetros, dicen que su llamativo vehículo "personal" tiene mucho más que personalidad. Una satisfecha ama de casa de Minnesota se limita a decir que lo que más le gusta es su "carácter juvenil". Algunos dueños, más analíticos, declaran que su kilometraje es mejor de lo que esperaban, que su manejo es excelente y que cuenta con potencia suficiente para todo
Por Bill Hartford
Los dueños se lamentan de que el asiento trasero es incómodo
Redactor Asociado de Automovilismo
DE TODOS MODOS, no quería un asiento trasero," dice un actuario de seguros de Massachusets en relación con su Mustang de: techo oblicuo. siendo éste el caso, no tiene ninguna queja que expresar. Pero los que sí querían un asiento trasero y creían que la fórmula "2 + 2" para un modelo de techo oblicuo que ofrecía la Ford significaba que cuatro adultos podían montar en el Vehículo con entera comodidad, se sienten totalmente defraudados. Han descubierto que "2 + 2 significa el conductor y un pasajero adelante y dos bolsas de víveres atrás," como lo manifiesta un químico de Maryland. Algunos substituyen las bolsas de víveres por niños o perros. Permiten que adultos monten en el asiento trasero sólo después de advertirles que corren el riesgo de golpearse la cabeza y salir con calambres en los piernas.
No podemos imprimir algunos de los violentos comentarios en relación con ese asiento trasero. Tal como dice el secretario-tesorero de una firma de Kansas, "el asiento delantero es estupendo, pero no quiero repetir los comentarios de otros con respecto al asiento trasero." y una enfermera de Maryland" se queja de la siguiente manera: "Es imposible montar en ese asiento trasero." Un especialista en publicidad de Kéntucky hace esta declaración: "Monte usted en ese asiento trasero y saldrá con dolores en las rodillas." Y así por el estilo . . .
Algunos dueños parecen darse cuenta de que el estilo de capó largo y cubierta trasera corta limita el espacio disponible en el compartimiento de atrás y que las líneas del techo oblicuo también contribuyen a reducir este espacio aún más. Por lo tanto, se muestran resignados con la incomodidad del asiento. Tal como dice un bombero de Florida, "no hay por qué esperar que el asiento trasero sea cómodo." Otros, usualmente los que tienen niños pequeños o perros, encuentran que el "incómodo" asiento trasero resulta ideal para sus necesidades. "Mis dos perros de caza montan atrás y parecen estar muy satisfechos," dice un oficial retirado de la Fuerza Aérea y cierto especialista en metalurgia de South Carolina declara escuetamente esto: "A mis niños les gusta."

Los conductores del coche se hallan satisfechos con el manejo y economía de combustible del Mustang pero algunos critican el poco peso del extremo trasero que se desplaza al efectuar virajes pronunciados a alta velocidad

El mensaje que todos quieren transmitir ala Ford es el siguiente: Que se siga incluyendo un asiento trasero. Puede seguir siendo pequeño, pero es necesario que sea más cómodo. El tamaño y la comodidad son dos cosas enteramente diferentes. Es mejor tener ese reducido asiento atrás que no tener ninguno, dicen los dueños del Mustang, pero todo el mundo quedaría más satisfecho si estuviera mejor acojinado.
El manejo, aunque significa diferentes cosas para diferentes personas, es la característica que más alaban los dueños del Mustang. Cierta ama de casa de Indiana dice que "el coche es muy fácil de manejar; hasta un niño podría conducirlo." Se trata de un comentario interesante, ya que la edad promedio de los dueños es bastante baja. El grupo de edad más numeroso es el de 20 a 24 años. La hija de uno de los dueños propone bajar la edad todavía más, de acuerdo con su comentario: "Todo adolescente debiera tener un coche como éste."
Es posible que el manejo sea lo suficiente fácil para un niño, un placer para las muchas mujeres jóvenes que nos han dado a conocer sus opiniones sobré el Mustang y "sensacional" para los que sienten afición a la velocidad. Pero hay algo en relación con el manejo que tiene nerviosos a algunos dueños del Mustang -la liviandad del extremo trasero. Un estudiante de Nebraska menciona esto, aunque le resta importancia: "Su tracción es sumamenté buena, no obstante el poco peso de su extremo trasero."
Comparativamente, el Mustang no tiene un extremo trasero de peso liviano. De hecho, todos los coches de tipo "deportivo" como el Mustang cuentan casi con la misma distribución de peso entre la parte delantera y la parte trasera- el promedio es de aproximadamente 57 por ciento del peso del vehículo en la parte delantera y el 43 por ciento sobre las ruedas traseras. Sin embargo, algunos dueños consideran que es liviano, debido a que a veces se desplaza hacia un lado. Un empleado gubernamental de Marylano dice lo siguiente: "Falta más peso en el extremo trasero; tiende a desplazarse con facilidad." un empleado de una fábrica siderúrgica de Minnesota se queja de "los saltos de las ruedas traseras." y "el extremo trasero es demasiado liviano cuando el coche se mueve sobre caminos mojados o cubiertos de nieve," declara un joven de Massachusetts. Esa misma ama de casa de Indiana que mencionamos antes no tiene otra queja que la siguiente: "El extremo trasero parece ser muy liviano. Mi coche tiene neumáticos anchos; pero, sin ellos, podría experimentar problemas, ya que el extremo trasero tiende a desplazarse sobre caminos accidentados o cuando llueve o cae nieve."

La suspensión trasera en el Mustang, al igual que en todos los autos de estilo "deportivo", es igual: eje rígido y muelles traseros semielípticos. ¿Qué solución puede haber? Simplemente mover el manubrio en dirección contraria y tener mucho cuidado.
En cuanto al estilo del Mustang, ya casi no queda nada que decir. El auto no ha cambiado mucho desde su presentación en 1964 ni tampoco ha disminuido el entusiasmo que despiertan sus líneas entre los dueños. Tal como se verificó en nuestra primera encuesta sobre el Mustang (MP de diciembre, 1964) , lo que más influyó sobre la compra del vehículo fue su estilo, como 10 dio a conocer un 61,8 por ciento de los propietarios. En 1968, esta cifra es de 57,8 por ciento. No es mucha la diferencia que digamos. Cuatro años después y con casi el mismo estilo de carrocería, sigue el Mustang conquistando al público -un fenómeno que sin duda deberá sorprender hasta a los mismos diseñadores.
Deben aumentar el tamaño del baúl del modelo de techo oblicuo y el convertible de techo duro, según los dueños, pero nadie dice cómo El singular estilo del techo, que es una de las cosas que más elogiaron los dueños, no produce quejas en relación con la visibilidad.
El aro de la bocina está muy lejos del manubrio (izq.) Las guarniciones se desprenden fácilmente (centro). La tira de cromo en las ventanillas pela los nudillos de los dedos (derecha)
El motor más popular es el V8 de 289 pulgadas cúbicas (4.73 l) y los propietarios se muestran muy satisfechos de su kilometraje promedio
Entre las características de estilo específicas del Mustang de 1968 que más se alaban, cabe mencionar los monitores de las señales de viraje empotrados en cada lado del capó (como los que se encuentran en los extremos delanteros de los guardafangos de muchos otros coches). De acuerdo con una secretaria de Maryland, "las luces de viraje son la mejor característica de estilo que tiene el Mustang."
Si el estilo básico del Mustang continúa siendo igual y cada año reaparece con sólo ligeros cambios de "identificación", los entusiastas del auto comenzarán aparecerse a los seguidores del Volkswagen, quienes saben dónde se encuentran exactamente las 629 mejoras del vehículo.
En 1964, sólo el 14.9 por ciento de los dueños declaró que la economía de funcionamiento del vehículo era la característica que más les gustaba. Hoy día esa cifra es de 31,3 por ciento. En 1964 no se consideró el kilometraje en relación con el desplazamiento de los motores, pero en 1968 las cifras correspondientes aparecen en el gráfico de la página 33. A pesar de que el kilometraje no puede considerarse como fantástico, sí es bueno y hasta mejor de lo que esperaban muchos dueños. Esto parece indicar que los propietarios del Mustang no son corredores de bólidos. Consideran que su auto no es un vehículo de carreras, sino meramente un coche de tipo deportivo, del cual se sienten sumamente orgullosos. Alaban su manejo y su excelente dirección, cosa que dice mucho en pro del automovilismo norteamericano.

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 43 - Agosto 1968 - Número 2


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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus